Al terminar la Guerra del Pacífico, la mayoría de los chinos emigraron a las principales ciudades, especialmente Lima, en donde se formó el asentamiento de cantoneses más importante del país.
Los inmigrantes chinos provenían principalmente de la provincia de Cantón y se afincaron principalmente en la ciudad de Lima, en el Barrio Chino, en los Barrios Altos, conlindante con el centro histórico de Lima. Es a partir del año 50 que se habla propiamente de un barrio chino en Lima. Por aquellos días apareció la calle Capón, llamada así porque ahí era donde se caponaba (castraba) a los cerdos. Se hizo famosa por sus "chifas", que cocinaban comidas típicas de las provincias de Guangdong (Cantón), Sichuán y Pekín, lugares de los que provenían la mayoría de los inmigrantes, quienes preparaban sus riquísimos y exóticos platos, con especias como la pimienta sichuán y el chempi, entre otros.
Esta parte de la ciudad, de arquitectura colonial y republicana, es una de las más tradicionales de la época, donde solían acudir bohemios, compositores e intelectuales a sus conocidos salones de té, pastelerías y restaurantes de comida china cantonesa acriollada que hoy forma parte de la gastronomía del Perú. Es aquí que se desarrolló exponencialmente el criollismo.
Entrada de la galería "Barrio Chino" en la Calle Capón |
Según Carlos Chu, editor del Man Chi Po, publicación de Lima dedicada a la población de origen chino, en el Perú existiría cerca de medio millón de personas con ancestros chinos, la inmensa mayoría nacidos en el Perú (sólo entorno medio centenar han nacido en China.
Fuente: Wikipedia
No hay comentarios:
Publicar un comentario